martes, 29 de noviembre de 2011

Un Día llamado Melancholia

Hace un par de meses que empecé a escuchar el rumor sobre el descubrimiento del planeta Melancholia que durante millones de años estuvo oculto detrás del Sol. Ahora parece ser que el rumor se ha convertido en una realidad y Melancholia se acerca hacia la Tierra, unos dicen que nos pasará de largo otros que es el fin de nuestros días... lo cierto es que no sé que pensar o quién debo creer, pero los últimos datos dicen que, en cualquiera de los dos posibles casos, ocurrirá en un par de meses, ¡en un par de meses!. Además los efectos que provocará el planeta a medida que se acerque a la Tierra afectará a las telecomunicaciones, es decir que todo tipo de comunicación a larga distancia desaparecerá durante algunas semanas mientras dure su paso por la órbita de la Tierra, al mismo tiempo cerraran todos los aeropuertos a escala mundial y hasta temen que el suministro de luz quede interrumpido durante todo el proceso, esas y más cosas ocurrirán a nivel tecnológico pero a nivel ecológico nadie sabe con exactitud que es lo que puede ocurrir con las mareas, el clima, la atmósfera, la fauna... lo curioso es que miras a tu alrededor y algunos parece que no va con ellos, escépticos o ignorantes, es solo una noticia más sin importancia y continúan con su rutina diaria, otros están verdaderamente asustados y optan por no hablar de ello, otros ya se preparan para lo que llaman el verdadero juicio final con sus guirnaldas y dioses.... ¡madre mía!, esta si que es una situación que no se puede tirar de manual, uno no puede ni pararse a pensar cual es el mejor bando ni cual será el mejor movimiento... hay que improvisar un plan, un plan que sirva de supervivencia y de despedida al mismo tiempo. Está claro que tendré que escoger entre algunas de las pocas opciones. 1. No puedo estar con todos los que quiero al mismo tiempo, sean familiares o amigos, tendrán que conformarse en saber que los llevo en mi corazón. 2. Mi ubicación será en la Naturaleza, en un sitio alto, una montaña para verlo llegar sin ningún tipo de interferencia. 3. Mientras espero el momento amaré a todo y a todos los que me rodean y si por aquellas cosas sobrevivimos esa será la semilla de la nueva vida. Y por último, justo en el momento que Melancholia nos absorba gritaré abrazado a mi pareja y mi hijo, con los ojos bien abiertos.

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